En nuestro municipio, al ser mayor de 20.000 habitantes, esta inspección es obligatoria para todos los edificios y son los propietarios los responsables de someter sus inmuebles a la inspección técnica. Todos los edificios deben someterse a una primera inspección dentro del año natural siguiente a aquel en que se cumplan cuarenta años desde su fecha de terminación, y a una segunda y sucesivas dentro del año natural siguiente a aquel en que se cumplan diez años desde la anterior.

Una vez sometido el edificio a la inspección se determina si esta es favorable o desfavorable en función de unos parámetros técnicos y caso de ser desfavorables se detallarán las obras a realizar para subsanar las deficiencias y el plazo de realización. Esto es fundamental para garantizar condiciones adecuadas de habitabilidad para las personas residentes de los inmuebles y una seguridad que les afecta tanto a ellas como a edificios colindantes y en muchas ocasiones a la seguridad vial.

Desde que se empezó a someter a los edificios a inspecciones en el año 2012 el cumplimiento de esta obligación ha presentado unas cifras dispares, si bien en global se han presentado un total de 1.858, suponiendo esto un 58,78% del total de 3.161 previstas. “Se trata de un porcentaje que está por encima de la media de ciudades de nuestro entorno pero con el que no podemos estar satisfechos”, señala el concejal de Urbanismo, Guillermo Ubieto.

Explica también que “las ITE´s tienen una función de evaluación que nos permite actuar en función de la salud de los edificios de la ciudad y por ello debemos trabajar para conseguir un mayor grado de cumplimiento. Es bueno para la ciudad, para las personas que residen en los inmuebles al garantizarles una serie de condiciones de habitabilidad dignas y eficientes y para todas las personas que realizan actividades en los mismos”.

Por ello desde el departamento de Urbanismo y Vivienda se está trabajando en un plan para poner en marcha medidas encaminadas a la mejora del grado de cumplimiento de la Inspección Técnica de Edificios. “Se va a trabajar en la intensificación de notificaciones informativas a las propiedades que están pendientes de presentar la ITE recordándolas la obligatoriedad de la medida y la normativa”, anticipa el edil.

“Recordamos que este documento es también un requisito para numerosas convocatorias de subvenciones cuyo objeto es financiar reformas de eficiencia o accesibilidad en viviendas, así como para la obtención de diferentes licencias con lo que no tenerlo puede suponer un perjuicio añadido a muchas comunidades de vecinos/as”, señala Ubieto.

El concejal de Urbanismo manifiesta que la intención del área que dirige  es ir avanzando en el cumplimiento sin necesidad de acudir al régimen sancionador contemplado en el Reglamento de Urbanismo de Castilla y León que recoge sanciones de 1.000 a 10.000€ como mínimo para aquellos propietarios que no tengan ITEs en plazo. “La sanción tiene que ser siempre la última opción y antes agotaremos todas las vías amistosas, pero en última instancia podemos valorar este extremo”, declara.

“A esta obligación de inspección están sometidas propiedades privadas y también las públicas, con lo que desde el Ayuntamiento tenemos la responsabilidad de someter nuestros edificios a estas inspecciones, por imperativo legal y también como ejemplo a nuestros vecinos y vecinas. Por ello en 2024 vamos a iniciar un proceso de revisión y sometimiento de inspecciones a los edificios públicos, porque tenemos que ser consecuentes cumpliendo nosotros como administración lo que le exigimos a la población”, termina Guillermo Ubieto.