En el Día Mundial de los Abuelos y Abuelas, CONFEMAC junto a ayuntamientos y entidades de todo el territorio nacional que se han adherido a esta campaña, ha redactado un manifiesto que recoge las bondades y privilegios de ser abuelo y abuela, reconociendo la educación en valores a través de las relaciones intergeneracionales; pero también para advertir que ejercer de abuelo y abuela no tiene que ser una obligación ni una sobrecarga, sino un disfrute con beneficios mutuos. Asimismo, recogiendo las manifestaciones populares de un estudio realizado por la Confederación, este manifiesto acoge la necesidad de erradicar el edadismo cuando se llaman abuelos y abuelas a personas mayores sin conocer su situación:
La del 26 de julio es una de las ocho campañas, relacionadas con las personas mayores, que ha puesto en marcha CONFEMAC a disposición de Ayuntamientos y entidades de todo el territorio nacional, bajo el eslogan común “Personas mayores, con los MISMOS derechos”.
MANIFIESTO:
- Ser abuelo/a no significa ser mayor, sino tener nietos/as. Llamar abuelos/as a las personas mayores es edadismo, una forma muy sutil de etiquetarlas de la misma manera sin entender su diversidad.
- Las personas mayores tienen derecho a tener un trato personalizado. Reivindicamos separar a imagen de la palabra “abuelo y abuela”, como sinónimo de “persona mayor”; porque las personas mayores son diversas, heterogéneas, y al igual que a una mujer o un hombre por tener 30 años y estar en edad de procrear no se les llama comúnmente mamá o papá, a las personas mayores no se las puede llamar abuelos/as.
- Ser abuelo o abuela es un privilegio innegable, pero ejercer de abuelo o abuela no debe ser una obligación y, por ende, una sobrecarga en muchos casos. Desde CONFEMAC pensamos que ejercer o no como tales no es una atribución de los hijos sino un derecho de las personas mayores.
- Considerar el mérito y las fortalezas de los abuelos y abuelas que actúan como como agentes socializadores de los nietos/as a través de la transmisión de valores, proveedores de cuidados, factores que influyen en su bienestar psicológico y en su salud.
- Admitir que la relación de abuelos/as con los nietos/as fomenta los niveles de satisfacción y supone un beneficio mutuo cuando existe realmente un intercambio intergeneracional de experiencias.
- Reconocer la labor que en muchos casos están desempeñando los abuelos/as como ayuda a las familias actuales y a la sociedad en general.
- Apoyar la actividad de las personas mayores voluntarias en programas intergeneracionales que fomentan un conocimiento mutuo y retroalimentación de dos generaciones que tienen mucho que aportarse, desmontando ciertos estereotipos como el conocido «batallitas del abuelo/a»
Por último, en este manifiesto se quiere reconocer la labor de los bisabuelos/as, que en muchos países se celebra el 29 de febrero, una fecha que se eligió mundialmente porque un bisabuelo/a es como tener «un abuelo más«, tal y como ocurre con los años bisiestos, que tienen un día de más.
Actualmente, y aunque esta imagen está sesgada en la sociedad, la mayoría de los abuelos/as siguen trabajando y en activo, y gracias a la alta esperanza de vida, los bisabuelos/as vienen a cumplir funciones de abuelos/as (“Abuelos/as y Abuelitos/as” suelen diferenciarlos los nietos/as). Vaya por delante nuestro reconocimiento a esas personas que han sido abuelos y abuelas por segunda vez y siguen transmitiendo la educación en valores.